Este pasado mes de mayo, coincidiendo con el octavo cumpleaños de Claudia, hemos viajado a LANZAROTE. 5 noches y 6 días dan para mucho, así que os lo iré contando poco a poco por el blog.
El objetivo de nuestra semanita era desconectar, turistear sin prisas, visitar lo más importante de la isla, disfrutar del clima, de la tranquilidad en familia y comer rico, rico, sin gluten por supuesto.
Los Jameos del agua con sus jameitos albinos, el secreto de la cueva de Los Verdes, de ruta por el Timanfaya como si de Marte se tratara, verde que te quiero verde de la charca de los  Clicos, Yaiza y sus blancas casitas, arena fina en la playa Papagayo, cactus y más cactus, La Geria y sus vinos tan especiales, miradores, Hervideros, y por supuesto Manrique genio, disfrutón y pura creatividad sostenible…
Como es habitual, llevaba mi listado bien organizado de locales y restaurantes seguros e imprescindibles organizados por zonas y la mayoría de ellos los hemos podido conocer, así pasó con VIVE LIBRE, restaurante muy familiar (pero mucho, mucho) en la zona del Puerto del Carmen, en el sureste de la isla, cerquita de donde nos alojábamos. 

VIVE LIBRE, local encantador y súper pequeñito regentado por un simpático propietario inglés, ha conquistado nuestro corazón. A VIVE LIBRE fuimos a comer nuestro primer día en la isla, tras acoplarnos en el apartamento y dar un paseo tranquilo a pie de playa.
Desde el momento en que cruzas la puerta de VIVE LIBRE, sa...