El clásico sandwich caliente de jamón y queso que todos nos hacemos de vez en cuando.
Es ideal para desayunos y meriendas. Y más sencillo de hacer que la croque monsieur. Si queréis saber más ?origen, modalidades-, aquí está su entrada en la wikipedia.

Como todos sabéis, este sandwich consta de dos rebanadas de pan, generalmente de molde, rellenas de jamón cocido y queso, y postriormente pasado por la plancha para que se tueste el pan y se funda el queso. Cada cual se lo hace a su gusto: con más o menos jamón o queso, con un tipo u otro de queso, etc.
Sugerencia: sacad la mantequilla de la nevera un rato antes de utilizarla, para que se ablande y sea fácil extenderla por el pan.
Ingredientes:
– Pan de molde.
– Jamón cocido.
– Queso cheddar en lonchas. – Mantequilla.
Procedimiento:
Coger dos rebanadas de pan de molde y untarlas con mantequilla por uno de sus lados. Colocar una loncha de jamón sobre una de las rebanadas, por el lado que no tiene la mantequilla.
 
Poner encima una loncha de queso y cubrir con otra de jamón.

Tapar con la otra rebanada de pan de molde, dejando el lado untado de mantequilla en el exterior.

Poner a calentar una plancha o una sartén, sin agregar aceite. Colocar en ella el sandwich y tapar para que no se escape el calor y se derrita el queso.

Ir dando vueltas para que se dore por ambos lados por igual. Cuando esté el sandwich doradito y el queso fundido, podremos sacarlo y degustarlo al momento.

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