Una de las recetas que no falla en nuestras  casas  son los huevos fritos, ¡lo digo sin miedo!,  si, ¡¡es mi comida preferida!!, podéis pensar que con los platos tan ricos que hace Carmen…  ¡¡casi es un sacrilegio!!  que yo me decante por este clásico de la cocina que junto con la tortilla de patatas tantas veces nos han acompañado en nuestras cenas, comidas y sobre todo almuerzos.
Dicen que hay platos con pasaporte, si este tuviese uno,  sería totalmente español. Los han fusionado, cocido, hervido, pochado, rellenado, deshidratado, esferificados, deconstruidos? pero  como más nos gustan  son con puntillas doradas y la yema como decía mi abuelo “para entrar a matar” , otro día os explicare mi manera de comerlos,  toda una ceremonia. Son el perfecto acompañante, todo les cae bien,  unas patatas fritas, un  puré, con arroz, ensalada (tenemos receta en el blog), pasta, carne, jamón, chorizo, setas? y un largo etcétera? . Estos de hoy, son los de siempre, con puntillitas y patatas fritas con color, morado concretamente y la verdad es que con el blanco y naranja  combinan muy bien. Ya sabéis,  este verano que pronto empieza si queréis ser originales y vestir vuestra mesa de un tono distinto,  aquí tenéis unos cuantos colores que juntos están para chuparse los dedos….  nuestra  música que hoy es de  Zaz – Padam Padam
Ingredientes:
Para 2 pers...