A medida que pasa la semana, nos vamos agotando, perdiendo energías y ganas de hacer cosas, pero, cuando llega el viernes, parece que nos volvemos a cargar sin saber muy bien porqué.

Además, estamos en plena primavera que muchos notamos que algún día nos faltan las fuerzas, en mi caso es el jueves cuando empiezo a organizar el menú del fin de semana, empiezo con los desayunos, algo de aperitivo, las comidas y si os soy sincera, las cenas las dejo libres, cada uno se sirve a su gusto abriendo la nevera y preparándose lo que más le apetece o en el mejor de los casos, lo más rápido.

El viernes ya estoy feliz, me encanta servirme el desayuno en una bandeja y salirme al salón, ponerme música y dedicarle todo el tiempo que se merece, no es mucho, pero el mero hecho de hacer este ritual ya me hace empezar el día más relajada y sin agobios.
Esta semana le ha tocado el turno a este delicioso "Cake de arándanos" que he sacado del libro del que ya os hable en las Madeleines, "Caprichos de repostería" y al que le he hecho algunos cambios, sobre todo en cantidades, las que pongo más abajo, son las que he puesto en la receta que hoy os presento.

Un libro que tiene dulces deliciosos y bastante sencillos de elaborar, en este caso salvo derretir la mantequilla, el resto es mezclar ingredientes, hornear, dejar enfriar y degustar.

La receta original es para magdalenas y cómo últimamente no tengo la cabeza donde la tengo que tener y voy aquí te pil...