Desde que entré en un restaurante de comida cubana y probé este picadillo habanero con arroz y frijoles supe que algún día lo incluiría entre mis recetas favoritas y tendría un hueco en el blog; es tan fácil de preparar y queda tan rico que es una de esas recetas que, sin duda, sumo al repertorio habitual de mi casa.

La cocina cubana, dicen todas las fuentes en las que me he documentado, es una fusión de costumbres taínas, de cocina española, africana y caribeña; cada receta recoge influencias de culturas diferentes que se funden dando como resultado unos platos exóticos pero llenos de tradición, con sabores sencillos que recuerdan a las ollas familiares y que, gracias a las especias y distintos condimentos, consiguen la diferenciación con otros platos no pertenecientes al ámbito caribeño. De la cocina de Cuba se escribe que los platos de carne y arroz predominan sobre los de pescado o verduras; el arroz está presente en platos tan conocidos como el arroz a la cubana, los moros y cristianos o el que presento hoy, el picadillo habanero, en el que se sirve como acompañamiento. Esta es una receta para hacerla sin duda, sin miedo, porque es muy sencilla y es difícil que quede mal; con una buena carne y la medida justa de especias se consigue un sabor que seguramente gustará a todos, incluyendo a los niños, siendo un plato único completo que además se puede dejar hecho el día anterior; quizás el arroz nos gusta más reciente pero si es necesario dejar...