Dinero, monises, cuartos, plata, pasta, guita, pecunio, parné...¡Quíen pudiera tener efectivo ilimitado! (o una tarjeta black, una golosina tan común entre nuestros politicuchos).
Por desgracia desde La Cocina de la Abuela no tenemos potestad para resolver el problema de falta de liquidez que a tantos atañe, pero sí para conseguir que os ahorréis unas perras gordas en las copiosas comidas que se avecinan, por supuesto sin renunciar con ello a un menu navideño digno de la mesa de un marqués.¡Vamos con ello!
Empezamos con los aperitivos:
Aparte de los consabidos entremeses y bocaditos varios vamos a darle nuestro toque a la mesa con un paté de mejillones casero, verás como no dejan ni las migas. Nos aprovecharemos de que el mejillón es super económico para conseguir una crema espesa, untable y llena de sabor. Seguimos con un plato de pescado: Merluza al horno con patatas panaderas. La merluza siempre está a buen precio, además, siendo previsores, podemos hacernos con unos lomos de merluza la mar de monos, congelarlos y descongelarlos el día de autos con suavidad. Sí, ya sé que el pescado cuanto más fresco mejor...pero...¡La pela es la pela amigos¡. La receta sencilla, y con un sabor muy tradicional.
Turno para el plato fuerte, plato de carne:

Como plato de carne nos hemos decantado por la más archiconocida de todas: el pollo. Un pollo al horno marinado. Olvidémonos de complicadas preparaciones a base de pichón, capón o perdices y concentrémonos en...