El día 22 de diciembre para mí también es el comienzo de la  Navidad, que yo declaro oficialmente inaugurada en cuanto escucho el primer canturreo de los niños de San Ildefonso repartiendo euros a pleno pulmón.
Y gracias a algún eurillo que se consigue rascar en el sorteo, a la paga extra de Navidad que a los afortunados en cobrarla puede  servir de consuelo a los que no tuvieron tanta fortuna en los bombos, a los ahorros del año o a la tarjeta de crédito que luego nos asfixiará durante 2018, lo que comienza mañana es la época del año en la que más regalos se compran.
Y hablando de comprar regalos, este año en vez de hacer como otros años y proponeros una lista interminable de regalos para toda la familia, voy a ser un poco más egoísta y os voy a proponer regalos para un Cocinillas, porque regalar a un Cocinillas no es tan fácil como parece. Pensadlo un poco, si vuestro razonamiento es: como a Fulanito le encanta cocinar lo tengo fácil, algo para la cocina, por ejemplo, una batidora, estáis cometiendo un error grave. Seguro que tu amigo ya tiene la batidora que le gusta porque se la ha comprado él y guarda otras tres empaquetadas en un armarios procedentes de regalos de alguien que antes pensó como tú.
En cambio, algo con lo que siempre vas a acertar es con algo de comer o de beber, ya sea cocinable o listo para degustar. Además, como los Cocinillas solemos ser personas muy generosas para las que uno de los mayores placeres de cocinar es compar...