En casa, cuando mi madre cocinaba lentejas, habitualmente, le ponía una patata a daditos al potaje con la idea de espesarlo un poco y así es como yo lo vengo haciendo también cuando hago lentejas. Pero resulta que en el mes de octubre del año pasado, cuando hice los "Panellets", compré un par de boniatos para hacerlos, pues el boniato es uno de los ingredientes que utilizo para la masa. Un boniato lo utilicé para la masa, como digo, y el otro se quedó en la cocina esperando que lo usara para alguna receta. Realmente, como más me gusta comer boniato es en forma de chips, cortado a rodajas muy finas y frito. Pero como últimamente procuro comer menos fritos y también me empeñé en aumentar mi consumo de legumbres, la cosa vino prácticamente rodada, pues pensé en guisar lentejas y cambiar la patata por el boniato. Me encantó cuando lo hice, tanto que desde entonces ya he repetido la receta varias veces en casa y hoy por fin me he decidio a compartirla. Y como el guiso de lentejas tampoco lo concibo sin chorizo, pues junté ambos ingredientes junto a mis lentejas, el constraste del dulzor del boniato con el sabor potente del chorizo es una pasada. Una vez más, cuando utilizo chorizo para una de mis recetas, recurro al Chorizo Extra de León de Palcarsa, elaborado únicamente con 5 ingredientes: carne de cerdo, pimentón, sal, ajo y orégano. Así de sencillo y así de rico.

Los inicios de la empresa se remontan a la marca de La Langreana, que ha e...