No os lo vais a creer, pero esta receta, de nombre impronunciable, la hice en el mes de junio y me había olvidado por completo de ella. Son unos crackers suecos que vi en Instagram a María Cosbel y me faltó tiempo para hacerlos. 
Ya sabéis que tengo mi receta de crackers que repito cada vez que se me terminan pero al ver esta me entró un antojazo increíble y me puse con ellos de inmediato. A mi me han gustado bastante porque van cargados de semillas pero mis hijas me dijeron que preferían mi receta, así que al final no los he vuelto a repetir, pero ya os digo que ahora que la voy a tener publicada y a mano, los volveré a repetir.
Knäckebröd. Crackers Suecos
Al contrario de la receta que yo hago que puedes comer un buen puñado y casi ni te inmutas, estos al ser más gordos y más grandes, te tomas dos y te quedas más que satisfecha, siempre y cuando no tengas un hambre feroz. A mi me parecen un tentempié perfecto para tomar a media mañana con un poco de queso o a media tarde en la merienda, incluso para llevar al trabajo y cuando te ente el gusanillo tomarlo sin remordimiento porque son muy sanos y nutritivos.
Se conservan en perfecto estado durante días, pero siempre y cuando los guardéis en un recipiente hermético. 
Podéis usar las semillas que más os gusten o tengáis en casa pero respetando las proporciones. Yo he puesto pipas de girasol, pipas de calabaza, semillas de sésamo, lino y de amapola.
Llevan harina de trigo sarraceno, centeno ...