Esta reconfortante crema está basada en la sopa de fideos con tomate que hacía mi madre. Una sopa muy andaluza que nos encantaba a todos en casa.

Yo no suelo triturarla pero si lo preferís obtendréis una crema muy suave y sabrosa. Luego solo os quedará añadirle los fideos y las gambas troceadas.

Si no habéis probado la hierbabuena en este tipo de preparaciones, os la recomiendo. Le aporta una frescura que os gustará mucho.

Ingredientes:

- 500 gr de gambas o langostinos
- Medio vaso de tomate natural triturado
- 1 cebolla
- 5 dientes de ajo
- 1 pimiento italiano
- 1 zanahoria
- 3 rebanadas de pan asentado
- Fideos gruesos (de fideuá)
- Caldo de pescado o pastilla concentrada de pescado y agua
- 1 vasito de vino blanco - Hierbabuena y laurel
- Cúrcuma
- Aceite de oliva

Elaboración:

Pelamos las gambas y ponemos las cabezas y las cáscaras en una olla con aceite de oliva, un cuarto de cebolla, la hoja de laurel y dos dientes de ajo pelados partidos por la mitad. Rehogamos a temperatura media, removiendo bien. A los 5 ó 6 minutos, echamos el vino, dejamos evaporar un par de minutos más y ponemos el caldo (3 vasos aproximadamente). Salpimentamos y cocinamos semi-tapado bajando la temperatura.

Mientras, picamos muy pequeños la cebolla, el pimiento verde, el resto del ajo y la zanahoria.

En una cazuela calentamos aceite de oliva y echamos las verduras. Cuando empiecen a cambiar de color, freímos las rodajas de pan hasta que se doren y las añadimos...