Comienzo el año con un bizcocho, no podía ser de otra manera, me encanta hornear y comer ricos bizcochos. Este en concreto es una delicia, me encanta el aroma y sabor que le aporta la harina de algarroba. El añadido de la naranja confitada convierte este bizcocho en una receta muy navideña además de servirnos para ir terminando con los excedentes que os hayan quedado u os vayan a quedar después de hornear vuestros roscones y panettones.

Mi intención era publicar un roscón de reyes pero no se yo sí me pasará como el año pasado que no dio tiempo a hacerle foto, nos lo comimos en caliente. Y este año preparé uno antes de Noche Vieja, era una prueba que no dio el resultado esperado, así que no he podido compartirlo.
Este año me he propuesto hornear por la mañana el roscón y hacerle la foto antes de la comida para poder compartirlo con vosotros. No os va a llegar para la tarde de reyes pero sí para el día 6. Así que ir comprando harina de fuerza y agua de azahar que como me de tiempo subo la receta.
Para hornear el bizcocho he usado el molde savarin de Pyrex de 22 cm de la tienda Ohgar el outlet de menaje del Hogar, vajilla y cocina. El molde es una maravilla, desmolda que da gusto y además es muy bonito. El tener un aro central, se debe hornear sobre la rejilla para que el aire caliente circule por el aro.

Espero que os haya gustado la receta de hoy, además creo que es una buena receta de aprovechamiento para terminar con las frutas escarchadas q...